Mientras las pocas almas bellas, como el caso de la dulce Leslie, deciden marcharse en buscan de vibrantes cariñoaventuras; me preguntó insistentemente: ¿estaré encerrad@ entre marranitos y marionetas?
Cuánta calamidad invade mi dulce corazón, cuántas cadenas sofocan mis delicadas alas, cuánto argumento de cartón sacude mis tímpanos de carey.
La dulzura de mi violín se estremece ante lo incordio de mi ambiguo entorno: titireteros fofos, ajadas muñequitas de papel crepe, bizantinas acuerdos de minut@s, lúgubres agresiones en los baños públicos y ficticias irrupciones de tenor...
Hoy, mis queridos lectores, me invade un lastimoso desdén...La ansiedad roe mis pensamientos, la duda me asalta con gravidez desmedida.
¿Seré acaso una bella marioneta en un escenario de peluche?¿Quién será el que unas veces tensa mis hilos, al punto de erizarme la piel, y en otras distende mi libertino espíritu? ¿Será mi libreto un discreto wikileak o tan solo un sucio freakyleak?
Todas estas dudas arrasan mi espíritu emprendedor, paralizan mi fino andar y corroen mi blanco violín.
Mami, dímelo de una vez...¿seré cerdito o marioneta?
Dubitativo,
Matías

Querido Matías: La inconsistencia de la vida puede crispar nuestras mas bellas alas, pero la fuerza de tu espíritu salvaje y libre no debe verse hostigado por marionetillas o cerdillos casi lechoncitos que lamen medias. Así que sigue libre, mientras tengamos nuestra mesa, nuestro pensamientos sublimes sobre pasaran nuestras expectativas
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